Los sistemas basados en el conocimiento desarrollados hasta hace poco constituyen la primera generación cuya característica común reside en la superficialidad del conocimiento que se incluye en el mismo. Los ingenieros de conocimiento (desarrolladores de los sistemas basados en el conocimiento) se limitan a incorporar en los sistemas la experiencia y criterios de los especialistas sin buscar las razones últimas en las que se basan.
Actualmente existen sistemas más avanzados, Sistemas de Segunda Generación, en la que el conocimiento se estructura en dos niveles. El primer nivel, de control (se suele aludir a él como metaconocimiento y las reglas que lo constituyen reciben el nombre de metarreglas), sirve para determinar la forma de utilizar el segundo nivel que es el que contiene el conocimiento de los expertos.
Las partes de un sistema experto incluyen una interfaz con el usuario, una base del conocimiento, una maquina de inferencias y una maquina de desarrollo. Los sistemas expertos permiten a los gerentes considerar más decisiones alternativas, usar un nivel de lógica superior al evaluar alternativas, tener más tiempo para la evaluación y tomar decisiones de forma consistente. Los sistemas expertos también permiten a la compañía realizar mejor su trabajo y mantener su recurso de conocimientos expertos.
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